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Quema de soca en Sinaloa afecta el clima e inhibe la lluvia, según especialistas
El calor que se genera impide la llegada de lluvias señala Juan Espinoza Luna
La quema de soca en Sinaloa está teniendo un impacto negativo en el clima local que supera hasta los 45° C y en la generación de lluvias, inhibiendo las precipitaciones según el geofísico Juan Espinoza Luna.
Aunque la temporada de lluvias inicio oficialmente el 15 de mayo hasta el momento en Sinaloa las lluvias han sido mínimas por no decir que nulas y mucho se debe a la quema de soca que se ha registrado en algunos valles agrícolas.
Después de diversos estudios en los suelos del Valle del Carrizo, Valle del Fuerte y Valle de Culiacán, Juan Espinoza señaló que la quema de soca genera zonas de isotermas (áreas de alta temperatura) que impiden la formación de lluvias
«Es increíble ver las quemas de soca por la carretera Eldorado. Ya se ha demostrado que se generan zonas de isotermas que no favorecen las lluvias, pues incrementan la temperatura de manera local. Estas prácticas solo perjudican a todos, pero ahí están de manera grotesca y dañina», comentó.
El aumento de temperatura que provocan estas quemas, asciende a niveles altos de la atmósfera, impidiendo que el aire frío baje y genere precipitaciones.
Destacó que, debido a la sequía extrema en la región y el estado crítico de las presas que se encuentran al 11.2% de su capacidad de conservación, la quema de soca no solo daña el suelo y el medio ambiente, sino que también afecta negativamente las condiciones climáticas.
«El calor generado por la quema de soca dispersa las nubes de lluvia, exacerbando la sequía», agregó.
¿Por qué queman la soca agrícola?
El deshacerse de la soca agrícola es una estrategia fitosanitaria para evitar la proliferación de plagas, pero las juntas de sanidad vegetal no recomiendan la quema de socas, por el contrario, esta acción es considerada un delito y sancionada económicamente.
- A pesar de esto, la quema de soca es una práctica común en los campos agrícolas de Sinaloa, los agricultores queman los residuos de cultivos anteriores para limpiar los campos y prepararlos para la siguiente siembra, produciendo daño ambiental y la degradación del suelo, el humo afecta la salud de las personas, contribuyendo a problemas respiratorios y enfermedades cardiovasculares.
Además, aumenta el riesgo de incendios forestales, otros predios agrícolas que se encuentren sin cosechar, así como la maquinaria y hasta la vida humana.
El impacto climático es alarmante, crear áreas de alta temperatura, interfiriendo con los patrones de circulación del aire que ayuda a la formación de lluvias. El aire caliente evita que el aire frío pueda descender, interrumpiendo el ciclo necesario para la generación de precipitaciones.
Este fenómeno, conocido como inhibición de lluvia por isotermas, incrementa la situación de sequía en Sinaloa, que actualmente afecta al 100 porciento del estado con 13 municipios afectados con Sequía Excepcional, la peor de todas.
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