Baja nivel de las presas de Sinaloa al 25%

El sistema de 11 presas en Sinaloa presenta un bajo nivel de almacenamiento, situándose al 25% de su capacidad, con 3,959.5 millones de metros cúbicos (mm³) acumulados, una reducción \ respecto al inicio del ciclo agrícola otoño-invierno 2024-2025, cuando las presas estaban al 31.8% de su capacidad, con 4,999.5 mm³.

Esta caída en los niveles es una advertencia crítica, considerando que para que la Comisión Nacional del Agua (Conagua) apruebe un ciclo agrícola sin restricciones, el sistema debería contar con 8,000 millones de metros cúbicos de agua.

La asignación de agua para este ciclo agrícola ha sido ajustada en comparación con el año pasado en varias presas.

Algunas de las asignaciones clave incluyen:

• Luis Donaldo Colosio (Huites): 1,413.20 mm³ (frente a 975 mm³ del año pasado)

• Miguel Hidalgo y Costilla: 1,458.40 mm³ (frente a 1,482.20 mm³)

• Gustavo Díaz Ordaz (Bacurato): 578.10 mm³ (frente a 608.20 mm³)

• Adolfo López Mateos (El Varejonal): 653.85 mm³ (frente a 760 mm³)

Sin embargo, ante la escasez de agua y el bajo nivel de almacenamiento actual, las autoridades están recomendando reducir la siembra de ciertos cultivos.

Ante la incertidumbre por la disponibilidad de agua, se están proponiendo ajustes en la superficie de siembra para el ciclo otoño-invierno, buscando limitar cultivos que demandan gran cantidad de agua, como el maíz blanco, el cual podría reducirse a 295,000 hectáreas, frente a las 526,000 hectáreas que se plantan en condiciones normales.

Las recomendaciones de superficie de siembra son las siguientes:

• Maíz blanco: 295,000 hectáreas (de 526,000 hectáreas en años normales)

• Maíz amarillo: 10,000 hectáreas

• Sorgo: 30,000 hectáreas

• Frijol: 60,000 hectáreas

• Trigo: 30,000 hectáreas

• Garbanzo: 60,000 hectáreas

• Cártamo: 5,000 hectáreas

Estas recomendaciones reflejan la necesidad de optimizar los recursos hídricos y enfocarse en cultivos más adaptados a la situación de sequía.

La escasez de agua en las presas y las posibles restricciones en el ciclo agrícola ponen en riesgo la productividad agrícola de Sinaloa, uno de los estados clave en la producción de granos en México. La situación también podría afectar a los productores en términos de financiamiento y sostenibilidad de sus operaciones.