¡El infierno! Así se ve el calor extremo de Mexicali desde una cámara termográfica | FOTOS

En la temporada de canícula, donde el calor extremo azota sin piedad a la capital de Baja California, la ciudad se ha convertido en un verdadero infierno. Con temperaturas que han roto récords históricos, alcanzando hasta 52.4 grados centígrados a la sombra, la canícula de este año ha cobrado la vida de más de 30 personas. Pero, ¿cómo se puede fotografiar algo que no se ve, como el calor abrasador? El fotoperiodista Víctor Medina Gorosave ha encontrado la manera, utilizando una cámara termográfica para hacer visible lo invisible y mostrar la brutal realidad que viven los residentes de Mexicali.

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Un Proyecto que Hace Visible el Calor

Medina Gorosave, un veterano fotógrafo de prensa que ha pasado más de una década capturando la vida en las calles de Mexicali, se propuso un desafío: retratar el calor extremo que se siente en la ciudad más caliente de México. “Quería fotografiar el calor de las cosas y las personas, sabiendo que la cámara termográfica es una aproximación porque lo que hace es fotografiar el calor que se emite,” explica.

Su proyecto, denominado «Calor visible», no es solo un experimento técnico, sino una cruda representación de las condiciones inhumanas que enfrentan los habitantes de Mexicali durante esta temporada. Con el apoyo de bomberos y utilizando una cámara que capta la radiación infrarroja, Medina recorrió la ciudad fotografiando a personas en su vida cotidiana, a trabajadores, a quienes viven en situación de calle, y a taxistas, así como a monumentos y lugares emblemáticos.

Un Infierno en la Tierra: Datos Impactantes

En sus imágenes, capturadas durante las horas más críticas del día – entre la una y las cinco de la tarde – Medina muestra cómo el pavimento puede llegar a los 65.4 grados centígrados y una persona puede alcanzar temperaturas corporales de hasta 51.4 grados cuando se encuentra sobre una plancha de concreto que arde a 64.9 grados.

“La brutalidad del calor se refleja en las fotos,” comenta Medina. “El pavimento alcanza los 60 o 70 grados centígrados, y es una brutalidad caminar sobre él; entiendes por qué se derriten las suelas de los zapatos.”

Mexicali: Una Ciudad en Lucha Contra el Calor

La realidad que documenta Medina va más allá de lo que reporta el Servicio Meteorológico Nacional. Mientras que las temperaturas oficiales – tomadas a la sombra – son alarmantes, la verdadera pesadilla se vive en las calles, donde los objetos y materiales expuestos directamente al sol almacenan un calor mucho más intenso.

Este proyecto no solo busca capturar el calor físico, sino también llamar la atención sobre las repercusiones sociales, culturales y económicas que trae consigo vivir en un clima tan extremo. “Cada temporada de calor mueren decenas de personas, en este año suman 35 decesos,” advierte Medina. “El transporte público necesita aire acondicionado, las escuelas requieren refugios y en algunas colonias ni siquiera tienen un ventilador.”

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El Impacto del Calor en la Vida Cotidiana

Con su cámara termográfica, Medina también ha documentado escenas trágicas, como cuerpos de personas que murieron por golpe de calor, cuya temperatura, al momento de la captura, era superior a los 49 grados. “Aquí, los cuerpos en lugar de enfriarse una vez que mueren, se eleva su temperatura,” comenta, evidenciando el nivel de estrés térmico que sufre la población.

Reflexión Sobre el Futuro en el Desierto

El fotoperiodista también plantea una reflexión sobre el futuro de Mexicali y la sostenibilidad de vivir en un ambiente tan hostil. “Cada año hay más calor y me pregunto hasta dónde podremos soportar,” confiesa. “No es que uno se acostumbre, sino que aprende a cómo no deshidratarse, a sobrevivir.”

A pesar de las condiciones extremas, Medina destaca el amor y orgullo que los habitantes de Mexicali sienten por su ciudad, a pesar de la naturaleza despiadada que los rodea. “El calor nos ha formado una identidad en Mexicali, y por eso también la estoy retratando,” concluye.

Las impactantes imágenes de «Calor visible» no solo documentan el infierno que es Mexicali durante la canícula, sino que también hacen un llamado de atención sobre la urgencia de abordar el cambio climático y sus efectos devastadores, tanto a nivel local como global.

Víctor Medina Gorosave es un destacado fotoperiodista con una larga trayectoria. Ha sido galardonado con premios internacionales como los Sony World Photography Awards y ha sido reconocido como uno de los 100 mejores fotógrafos del mundo. Actualmente, colabora de manera independiente para agencias internacionales y medios de comunicación en México.