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Con tamales, misa y fiesta, festejan Día de la Candelaria en Quilá
Se espera la llegada de más de 30 mil visitantes a esta festividad con más de 4 siglos de antigüedad.
FOTO: Brandon Sainz.
Desde las primeras horas de este jueves, 2 de febrero, iniciaron los festejos por el Día de la Candelaria en la sindicatura de Quilá, donde feligreses hicieron su arribo a la parroquia de la santa patrona para los festejos que ya son una tradición a nivel regional, con mas de 4 siglos de antigüedad.
Con tamales, una emotiva misa y los festejos tradicionales en devoción a la Virgen arrancó esta festividad, la cual estará presente hasta el 4 de febrero y se espera que a partir de las 12:00 del día lleguen las peregrinaciones y Quilá reciba hasta 30 mil visitantes o más.
El padre del Santuario Nuestra Señora de Quilá, Jesús Ivan Rocha Mercado, comentó como cientos de feligreses hacen acto de presencia en las misas de la Iglesia, al afirmar que con el corazón todos le rinden una inmensa fe y amor a la Virgen.
Y es que aseguran que les ha cumplido muchos milagros, así como también relató desde hace cuantos años se ha venido manifestando esta celebración.
«Tiene pasadito de 4 siglos esta devoción, en 1602 vino el arzobispo de Guadalajara, porque se entero que habían una imagen idéntica a la de la basílica de Zapopan, ahí empezó la devoción y se fue extendiendo», destacó el párroco Jesús.
Feligreses expresaron los milagros que la Virgen les ha cumplido y, aunque algunos no han recibido una bendición milagrosa, su fe les sigue intacta.
«Le pedí por mi hija a la Virgen de Guadalupe, por eso ella se llama Diana Guadalupe, porque se estaba ahogando con la leche de mi pecho, y yo no la podía volver la empece a levantar para arriba, pidiéndole a la Virgen y ella me la devolvió, volvió a estar bien».
«He pedido promesas de personas que están enfermas, y se me han aliviado, vengo yo casi todo el tiempo a ver a la Virgen de Quilá y me siento muy agusto».
«Vine a la misa para pedirle por la salud de un hermano mío, pero no me he concebido ningún milagro pero si creo, si tengo fe, tengo fe en que la virgencita de Quila, me vaya aliviar a mi hermano».
Actividades
En estos festejos, desde muy temprano, el Ayuntamiento brinda un programa lleno de actividades culturales, teatro, grupos musicales en vivo, banda, festivales para niños, danzas, alimentos, juegos mecánicos, bazares y mucho más
Para el mediodía se realiza la misa conmemorativa en ofrenda a la Virgen de la Candelaria, en donde hay una gran afluencia de feligreses.
En la tarde y resto de la noche, cientos de familias disfrutan de la mini feria y los juegos mecánicos, así como de la gastronomía sinaloense, al son de la banda.
Si eres de comunidades aledañas, o vienes de fuera del estado, no dudes en visitar Quilá y disfrutar de la festividad, la cual estará desde este miércoles 1 hasta el sábado 4 de febrero, durante todo el día.
Celebración del Día de la Candelaria en México
Según la tradición católica, el 2 de febrero, exactamente 40 días después de Navidad y del nacimiento de Jesús, la Virgen María acudió a la iglesia para «ser purificada» después del parto y de su cuarentena y para agradecer el nacimiento del niño Dios.
Ese día, la Virgen llevó candelas a la Iglesia para que fueran bendecidas, como símbolo de la luz que traería su hijo a la Tierra, de ahí deriva palabra «candelaria».
Sin embargo, este festejo, que llegó a México en la época del Virreinato, se mezcló con una tradición azteca (previa a la Conquista): celebrar la temporada de siembra, que iniciaba el mismo 2 de febrero, comiendo tamales.
La dinámica de esta celebración comienza con la famosa partida de rosca de Reyes Magos: quienes encuentren en su rebanada de rosca un muñequito que representa al niño Dios, serán los encargados de comprar los tamales para la Candelaria.
¿Por qué comemos tamales?
En el calendario azteca, el 2 de febrero es el día de la bendición del maíz, fecha que se celebraba haciendo tamales.
Durante las celebraciones del inicio del tiempo fértil de la tierra, los mexicas rendían tributo a Tláloc y Chalchihuitlicue regalando maíz y posteriormente tamales.
Una vez que ocurrió el sincretismo cultural entre los pueblos prehispánicos y la religión católica, los tamales se preparaban para servirse en las reuniones del 2 de febrero después de acudir a la Iglesia.
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