Después de 14 años, Fidel se reencontrará con su familia: Sabuesos Guerreras

Culiacán, Sin.- No fue una casualidad que el pasado 14 de octubre, Fidel, quien se encontraba deambulando en Culiacán por la banqueta de las oficinas del colectivo Sabuesos Guerreras, ya que al verlo pasar, la líder del grupo de buscadoras, María Isabel Cruz Bernal se acercó a él para platicar y después de abordarlo le ofreció un plato de comida y le pidió permiso para tomarle una fotografía, con el fin de subirlo a redes sociales y tratar de encontrar a su familia.

Este joven, primero dijo que era de Matías Romero y luego de Guerrero, lo cual sirvió como una pista, ya que pasó sólo un día después cuando la imagen se viralizó y sus familiares contactaron al colectivo, quienes informaron que Fidel Gaspar Estudillo había salido de su casa desde los 14 años, se había ido a Estados Unidos y después de eso no supieron más de él, por lo que creían que estaba muerto.

“Había datos que corroboramos y que la familia también nos mandó, un tatuaje, unas cicatrices,  lo cual salimos a buscarlo para contactarlo y resguardarlo porque no queríamos que se nos perdiera otra vez de vista”, explicó.

“La reacción de la familia fue el llanto total, tratar de contactarnos a las dos o tres de la mañana y cuando hablé con la hermana no lo podían creer  porque dicen que ellos ya lo creían muerto, sí es emoción y querían verlo, los sentimientos encontrados”, narró.

Una vez que se idéntico a esta persona el colectivo solicitó el apoyo de la Comisión Estatal de Búsqueda para que aportaran recursos para el traslado de los familiares de Fidel y en lo que ellos llegan por él fue resguardado en el albergue el Buen Samaritano en donde se le brindó ropa y alimento. 

Finalmente, Cruz Bernal manifestó que las redes sociales fueron de gran ayuda para dar con el paradero de la familia de esta persona, por lo que pidió a las autoridades poner también atención a los indigentes.

Así como es el caso de la familia de Fidel, actualmente en el Colectivo Sabuesos Guerreras hay 470 personas que todos los días tienen la esperanza de volver a ver con vida a su hijo, papá o quizás su hermana. 

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